miércoles, 27 de octubre de 2010

El vecino informático

Fue Ricardo quien me hizo reparar en él: “Oye, tu vecino ese está ahí con el ordenador a todas horas. Siempre que vengo le veo ahí sentado” Desde entonces no puedo dejar de comprobarlo cuando me asomo a la ventana; parece como las putas del barrio rojo de Ámsterdam, siempre ahí a la vista en el escaparate, "haciendo estampa". Le he visto en tetas, con la camiseta de España, en pijama....


Durante mucho tiempo pensé “Ay, dios mío, qué lamentable este pobre hombre, siempre delante del ordenador. Es que no tiene vida social, ni ná...” Pero un día hice un poquito de auto-análisis; ¿Cuántas horas paso yo aquí delante de la pantallita? Si alguien pudiera verme a mí desde fuera, quizás también podría echarse las manos a la cabeza. Solo para darse cuenta después –a poco auto-crítico que sea- de que él/ella hace algo parecido.

Porque claro, hay tantas cosas que se pueden hacer frente al ordenador, que aunque desde fuera pueda parecer que siempre estamos haciendo lo mismo, no es así. Podemos estar leyendo blogs o noticias, o investigando algún tema que nos interese, o viendo u organizando nuestras fotos, o buscando curro, o buscando un vuelo barato para nuestras vacaciones, o leyendo nuestro correo... incluso podemos estar “socializando”, chateando con algún amigo. Todo está aunado en esta pantallita.

Y lo cierto es que aunque por un lado me siento aliviada con esta justificación, por otra me viene a la memoria la imagen de los humanos de la película de wall-e. Viven sentados en un sillón aero-deslizante, y todo lo hacen a través de una suerte de ordenador futurista que tienen delante de los morros; hasta parecen haber perdido la capacidad de percibirse entre ellos, y para socializar lo hacen únicamente a través de la pantalla.

Cuando nos enganchamos al ordenador es como si viviéramos en una realidad “ficticia” –o una realidad paralela. Parece que “nos movemos”, que hacemos cosas, pero en realidad estamos sentados delante de una máquina, horas y horas, físicamente aislados de los demás. Si nos lo hubieran dicho hace veinte años, nos hubiera parecido demencial.

Termino de escribir el post, me asomo a la ventana y ahí sigue el vecino. Hoy lleva una camiseta roja con el logo de cerveza Duff.

6 comentarios:

  1. llama y que te invite a una cerveza.

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  2. Bienvenida a Matrix! xD

    Oye! Ese tío tiene un McDonals en casa?? Hamburguesa con su respectiva bandeja marrón?!?!

    xDD

    Un saludo!

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  3. Tu vecino como no ponga una cortina, lo vas a tener con toda una colección de camisetas jajaja.
    Tienes toda la razón,pasamos mucho tiempo en delante de este "cacharro"...Pero también hacemos muchas más cosas :)

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  4. Ehhhh, pero en la foto que tiene la camiseta de Duff, no esta con el ordenata, esta con un libro, punto para el vecino, noooooo¿? ;-D

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  5. Davidiego, ¿tú me crees tan desesperada? :D

    ¡Matrix, allá vamos! Tienes razón, Quico. Lo de la bandeja será casualidad... digo.

    Ahi vamos Laura, ¡a ver cuándo repite modelito! :D

    Manu... ¿¿eres tú?? Pues te diré que puede que estuviera leyendo algo que acababa de imprimir, porque en las otras fotos sale claramente tecleando. Pero he tenido que quitar la de Duff, porque toca foto nueva...

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  6. Hola maja, si soy yo, voy a tener que cambiar de nick, ;-P ...
    En la foto parecia mas un libro que una hoja sola, o por lo menos eso me parecio..
    Que es ya SAN VIERNESSSS.....

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