Igualdad entre hombres y mujeres significa que nadie tenga menos derechos –u obligaciones- por razón de sexo. Históricamente la mujer ha sido el sexo en desventaja, y en algunos ámbitos, muchos aún, tenemos que seguir luchando para que la igualdad sea una realidad.
Pero esto no debería ser una guerra de sexos; no somos ellos malos y nosotras buenas o viceversa. No podemos seguir polarizándonos en “hombres” y “mujeres”; esta es una lucha que deberíamos llevar a cabo todos juntos.
Por eso no me indigna menos ver la situación de indefensión y desamparo en que quedan algunos hombres tras una separación, y cómo la otra parte abusa con todas las armas de que dispone, no dudando en utilizar a los hijos de ambos para manipular a su ex, machacándole emocional y económicamente.
O mujeres que denuncian a sus parejas por malos tratos cuando no los ha habido; por venganza, por celos…
Creo que ya es hora de que todos, independientemente de nuestro sexo, reconozcamos las injusticias de que somos testigos, y nos pongamos del lado del “bueno” sin mirar si “el bueno” es hombre o mujer. Sin reticencias y sin excusas.
Pero esto no debería ser una guerra de sexos; no somos ellos malos y nosotras buenas o viceversa. No podemos seguir polarizándonos en “hombres” y “mujeres”; esta es una lucha que deberíamos llevar a cabo todos juntos.
Por eso no me indigna menos ver la situación de indefensión y desamparo en que quedan algunos hombres tras una separación, y cómo la otra parte abusa con todas las armas de que dispone, no dudando en utilizar a los hijos de ambos para manipular a su ex, machacándole emocional y económicamente.
O mujeres que denuncian a sus parejas por malos tratos cuando no los ha habido; por venganza, por celos…
Creo que ya es hora de que todos, independientemente de nuestro sexo, reconozcamos las injusticias de que somos testigos, y nos pongamos del lado del “bueno” sin mirar si “el bueno” es hombre o mujer. Sin reticencias y sin excusas.
aviso... me voy a explayar:
ResponderEliminarDicen los Altos Escritos que Dios creó a la mujer de una costilla de Adán. Leído esto, ¿es acaso una forma de autoflagelación el hecho de que un hombre alce su bastarda mano contra el de su pareja?, más bien es una forma de autodestrucción.
Desde pequeños, el niño-hombre aprende a no llorar, a disparar con su pistola de juguete y a escupir a todo aquello por lo que siente desprecio. Por su parte, las niñas-mujeres son adiestradas en el hábil manejo de la “cocinita”, siempre pulcras y arregladas sin posibilidad de jugar a nada que sea de niños, por temor a ser unos chicazos.
Cada día crece el número de mujeres asesinadas por sus maridos mientras que la noticia sigue siendo: “hombre que se suicida tras matar a su esposa”, cuando en realidad el titular debería ser más o menos así: “una mujer inocente muere a manos del cabrón de su marido”. ¿Hasta cuando esta situación?
Un día, mientras estaba adormilado en el metro, una conversación me devolvió a la realidad. Dos jóvenes iban riéndose a carcajadas cuando uno de ellos dijo: “Nosotros no pegamos a las mujeres, las educamos”. Acto seguido, los chicos (por decir algo), comenzaron a reír de forma estridente mientras uno de ellos simulaba que pegaba a una chica que iba de pie. Durante el resto del viaje permanecí en silencio, abstraído y avergonzado por todo aquello que acababa de presenciar. Sin comentarios.
¿Acaso tendrían que impartir en los colegios asignaturas de convivencia? En mi opinión sería más útil aprender a convivir antes que cualquier clase sobre la reproducción de las flores. Parece que estamos avanzando, que la mujer va integrándose a un mundo que no parece estar hecho para ella, pero todo es apariencia, ficción.
Admiro a todas esas mujeres que duermen con su enemigo, que viven presas del pánico por temor a que se abra una puerta, que maquillan las heridas de la cara sin poder curar las del alma. Mujeres que se maldicen a sí mismas por un “sí quiero”. Mujeres que piensan en aguantar un poco más por miedo al “qué dirán”, conscientes de que la Justicia se ha vendado los ojos para ellas.
Hay que dejar atrás ese pensamiento de que la mujer es el “sexo débil” porque en realidad es el hombre quién lo va debilitando. Ya va siendo hora de que el hombre baje los puños para que las mujeres dejen de derramar lágrimas y puedan ser libres para ser y amar.
Como rezaba una antigua campaña de concienciación sobre los malos tratos: 'El amor no es la Ostia'.
Por otro lado ver como mujeres se separan de sus maridos haciendo que estos le "solucionen la vida" aprovechandose de temas como maltrato, sin que nunca haya habiado una sola bofetada me parece que es reirse de esas mujeres que han dado la vida por un simple "tengo que aguantar", en muchos de estos casos la culpa no es de las muejeres sino de los abogados que con argumentos como: si denuncias a tu marido por malos tratos te aseguras una casa, un sueldo y la custodia de tus hijos; Muy triste, pero hablo de casos reales. Todo esto es mierda que genera odio, ya no entre sexos sino entre seres humanos, alimenta el machismo y el hembrismo haciendo que los humanos nos volvamos mas egoistas y nuestras mentes se pudran un poquito mas...
Creo que la solucion no es estar en contra del machismo o del hembrismo, simplemente el no dar ningun valor al sexo (y no me refiero al acto sino al genero) sino en no parar a pensar y prejuiciar a un ser por lo que lleva entre las patas y aprender a amarnos los unos a los otros como los curas no nos han enseñado..
Vale ya paro... pero tenia miga...
Te habrás quedado vacío!!! XD Pero me gusta lo que dices
ResponderEliminarBueno sister, te diré que me has tocado en el alma, conoces bien las putaditas, chantajes y demás que me han echo durante mi separación, pero lo que no se si me has oido alguna vez decir, es que si no llega a ser por tí, Bea y Ana, hoy sería un misógino amargado, pensando que todas las mujeres son...en fin.
ResponderEliminarGracias a las tres por recordarme que el mundo no es de hombres y mujeres, sino de personas, de verdad ¡¡GRACIAS!!
Jo Carlos, una doble alegría me das. Porque te pases por aquí a echar un vistacillo, y por eso tan bonito que dices... casi hasta me emociono... :')
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