Ayer por la tarde me armé de coraje y emprendí la expedición al centro que había estado postergando todos estos días. Tenía una misión: comprar el regalo de Reyes de mi madre. Afortunadamente iba a tiro fijo, porque desde casa ya había visto en Internet que en La Casa del Libro tenían "Frases célebres de niños", un libro que ya llevaba tiempo queriendo comprarle.Cuando la dependienta estaba metiendo el libro en el sobre de papel, y cerrándolo con un par de celos, pensé "La verdad es que sería mejor… bueno, es igual, espero que se despeguen bien los celos. Y si no, ya lo volveré a envolver" Y afortunadamente sí, los celos se quitaron bien, y anoche estuve en casa soltando carcajadas sola hasta las dos de la mañana.
Os dejo aquí algunas de mis frases favoritas; y ya sabéis, si aún os queda algún regalo que hacer…
Estaba toda la familia celebrando el Día del padre en casa. El hermano mayor de Juanma regaló a su padre un dibujo, y su padre leyó en voz alta la frase que había escrita en el dibujo: "Para el mejor padre del mundo". Cuando acabaron de comer, Juanma se fue al baño, y al rato se le oyó gritar: "¡A ver, ese padre mejor del mundo, que venga a limpiarme el culo"
Alba, 3 años
Luis, 4 años
Estaba Luis con su padre construyendo un circuito de tren en el que había dos puentes y Luis comentó: "Yo de mayor quiero hacer puentes para que pasen los trenes". Y su padre le dijo:" Entonces de mayor vas a ser ingeniero…" Luis preguntó "¿Y es bonito el disfraz?"
Un día, de camino al colegio su madre le dijo "Qué pocas ganas tengo de ir a trabajar" Y él contestó muy serio: "Pues déjalo. ¡Con tres cojones!"
"Un día su padre le preguntó "Adrián, ¿tienes novia?" Adrián respondió: "Sí, se llama Dunia y ayer me dio un besito en la boca." Su padre insistió: "¿Y dónde os veis?" Adrián le contestó "En el recreo" "¿Y qué hacéis en el recreo?" siguió preguntando su padre. Y Adrián le contestó: "Pues hablamos de sumas y restas."
Yago estaba tumbado en el sofá y su madre le riñó: "¡Yago, no pierdas el tiempo!" Yago dijo: "Mamá, no lo estoy perdiendo, lo estoy disfrutando".
Un día que su madre le estaba regañando, Sergio le dijo: "Mamá, no cruces los brazos, que te enfadas".
Un día le preguntó su padre: "Mariano, ¿tú qué quieres ser de mayor?" Y el niño, muy serio, respondió: "Yo, repartidor de pizza… Bueno, no, mejor una zarigüeya colgada de un árbol"


